Sábados de Sonetos #2: Gustavo A. Bécquer

Rima XX
Sabe, si alguna vez tus labios rojos
quema invisible atmósfera abrasada,
que el alma que hablar puede con los ojos,
también puede besar con la mirada.

Rima XXIV

Dos rojas lenguas de fuego

que a un mismo tronco enlazadas

se aproximan y, al besarse,

forman una sola llama.

Dos notas que del laúd

a un tiempo la mano arranca,

y en el espacio se encuentran

y armoniosas se abrazan.

Dos olas que vienen juntas

a morir sobre la playa

y que al romper se coronan

con un penacho de plata.

Dos jirones de vapor

que del lago se levantan

y, al juntarse allá en el cielo,

forman una nube blanca.

Dos ideas que al par brotan;

dos besos que a un tiempo estallan,

dos ecos que se confunden;

eso son nuestras dos almas.

Bécquer me encanta, fue mi poeta favorito durante mucho tiempo. Empezó a serlo cuando, en 5º de Primaria, nos mandaron de deberes aprendernos el poema Volverán las golondrinas. Me he leído todas sus Rimas, aunque aún tengo que leerme todas las Leyendas. Hoy os traigo dos poemas porque son cortitos.

Gustavo Adolfo Bécquer, nacido en 1836, fue un poeta español exponente del Romanticismo tardío, caracterizado por una sencillez expresiva y el intimismo. Su obra influyó notablemente figuras posteriores como Rubén Darío o Juan Ramón Jiménez; es considerado el iniciador de la poesía española contemporánea.